De las más de 2.600 viviendas con pisos de tierra que se contabilizaron en Ciego de Ávila en 2023, el gobierno provincial solo puede prometer arreglar 110 este año. Con todo, la cifra está muy lejos de las 300 anuales que, según el periódico Invasor, figuran en el “plan de solución” de la Dirección de Ordenamiento Territorial y Urbanístico.
El centenar de casas que “podrían concluir el 2024 con pisos de cemento” pertenecen a trabajadores del sector de la Educación, pues, alega la nota oficial, los educadores “constituyen prioridad por el impacto social de la labor que ejercen”.
La ejecución de los pisos está a cargo de la Empresa Provincial de Abastecimientos y Servicios a la Educación en lo que catalogan como “esfuerzo titánico”, debido a la escasez de materiales de la construcción. Como pírrico ejemplo de avance, resalta la nota que dos hogares del municipio de Bolivia, donde se contabilizan siete viviendas de educadores con pisos de tierra, ya cuentan con piso de cemento.
El centenar de casas que “podrían concluir el 2024 con pisos de cemento” pertenecen a trabajadores del sector de la Educación
Invasor señala que en un encuentro con Liván Izquierdo Alonso y Alfre Menéndez Pérez, secretario del Partido y Gobernador en Ciego de Ávila, respectivamente, se acordó la estrategia “Abrazando al barrio”, con el fin de contar con empresas estatales y privadas para construir y reparar distintos tipos de inmuebles.
El pasado noviembre dos mipymes privadas asumieron también en Ciego de Ávila la reparación de la sala de cuidados respiratorios del hospital pediátrico Doctor Antonio Luaces Iraola. Otras empresas, como las de Servicios Comunales, la Unión Eléctrica, Aprovechamiento Hidráulico, Materiales de la Construcción y Abastecimiento y Servicios a la Salud, la Dirección Provincial de Cultura, el Ministerio de la Construcción, RTV Comercial y la mipyme Media Luna ya habían intervenido otros espacios de la institución sanitaria.
Según el propio medio, en una reunión con Ramiro Valdés Menéndez, el mismo noviembre, se dijo que en el 2021 se habían eliminado los pisos de tierra pero que “volvieron a resurgir o quizás no se detectaron desde el principio”, justificó el viceprimer ministro cubano.
En marzo de 2023, Invasor anunció que el año comenzaba “bien” para el programa de la vivienda en ese territorio. Hasta ese momento se habían edificado 30 células básicas, 36 hogares estatales y 97 por privados, 163 de las 1.321 que pretendían construir durante ese calendario.
Al cierre de septiembre de 2023 solo se habían terminado 649 casas de las 1.321 previstas para ese calendario
Sin embargo, siete meses después el periódico oficialista publicó que al cierre de septiembre solo se habían terminado 649 casas del total previsto. El déficit del fondo habitacional en esa provincia supera las 40.000 viviendas, y un tercio de las casas está en regular o mal estado.
El julio del pasado año Granma publicó que la eliminación de pisos de tierra en la Isla era muy baja. De las 61.559 casas identificadas en esta situación, solo al 3% se le había solucionado el problema, 2.103 en total.
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