El Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex) del régimen cubano negó este 20 de diciembre que el castrismo esté vinculado a actos vandálicos e injerencistas en Argentina.
El director general de América Latina del Minrex, Eugenio Martínez, dijo “que Cuba no promueve, ni participa, ni ejecuta actos que constituyan injerencia en los asuntos internos de la Argentina.
La narrativa que busca responsables en Cuba de situaciones internas en Argentina es un intento fallido de hallar causas donde no deben buscarse”.
Sin embargo, la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, confirmó que el gobierno de Javier Milei está trabajando para identificar y desarticular grupos de agentes cubanos y venezolanos en el país que supuestamente tienen instrucciones de sembrar el caos.
Bullrich, en entrevista en un programa del diario La Nación, se refirió a estos grupos como “una minoría ruidosa” que suele ejecutar entre 8 000 y 10 000 protestas al año. “No son marchas, son piquetes: van, cortan la calle y no dejan que nadie pase”, dijo la ministra. “Nuestra decisión es poner orden en las calles”.
Si bien evitó dar detalles sobre la estrategia específica, Bullrich fue tajante respecto a los manifestantes que actúen como “instigadores”: “El protocolo es una orden a las fuerzas de seguridad de actuar. Está dentro de los marcos legales y del Código Penal”, aclaró.
Además, el presidente de Argentina no nombrará embajadores ante tres dictaduras latinoamericanas: Cuba, Nicaragua y Venezuela; lo que constituye un giro diplomático de su Gobierno.