MIAMI, Estados Unidos. – El número de cubanos que logró ingresar a Estados Unidos gracias al programa de parole humanitario se redujo a un número mínimo en octubre: al menos 180 cubanos fueron admitidos, la cifra más baja desde el inicio de esta iniciativa hace casi dos años, según datos del Departamento de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP, por sus siglas en inglés).
El reporte oficial, que marca el comienzo del año fiscal 2025, revela que en total unos 620 nacionales de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela obtuvieron entrada con el parole humanitario durante octubre. De ellos, al menos 184 cubanos ingresaron por Miami, Tampa y Houston, un flujo reducido respecto a los 316 admitidos el mes precedente.
La cifra no es exhaustiva porque no incluye otros puertos de entrada, pero se considera una aproximación bastante cercana a la realidad.
En lo que va del programa, 110.240 cubanos han logrado ingresar a territorio estadounidense con parole humanitario, mientras apenas unas 740 personas quedarían pendientes de viajar. Sin embargo, el impulso inicial del programa —que pretendía acoger a unos 30.000 inmigrantes mensuales— se ha visto frenado por investigaciones sobre presunto fraude y un informe del Comité Judicial de la Cámara de Representantes que califica la iniciativa de “un desastre plagado de fraudes”.
El documento del Congreso acusa a la administración Biden-Harris de no considerar “la prevención del fraude, la actividad criminal o el efecto sobre las comunidades estadounidenses” al implementar el programa. Bajo este clima adverso, la perspectiva de que el programa se desmorone tras el retorno de Donald Trump a la Casa Blanca parece cada vez más probable.
“Las estadísticas de entradas de parole humanitario seguirán decreciendo hasta diciembre y el programa morirá en enero”, advirtió el abogado de inmigración Willy Allen al periodista Wilfredo Cancio Isla. “No será lo primero que el presidente [electo] vaya a eliminar, pero sí va a estar suspendido en las semanas iniciales”.
Allen también fue tajante al recomendar a quienes aún esperan por la aprobación: “El programa está muerto desde su primer aplazamiento y la gente debe ya convencerse que este no es más el camino para ingresar legalmente a Estados Unidos, con el parole humanitario no van a entrar y tendrán que buscar otras alternativas, como las peticiones familiares”.
Trump ha prometido desmontar el programa de parole humanitario y el sistema de citas CBP One.
Aunque migrantes en espera de citas en México denuncian demoras y fallos en la aplicación de CBP One, el CBP asegura que la herramienta “continúa en marcha con absoluta normalidad”. La agencia afirmó que “un porcentaje de las citas diarias disponibles se asigna a los perfiles CBP One registrados con mayor antelación” para priorizar a quienes llevan más tiempo intentando obtenerlas.
Con el futuro del parole humanitario en entredicho, los migrantes cubanos también han optado por unirse a caravanas rumbo a la frontera, buscando entrar a cualquier costo.