Thursday, January 23, 2025
Google search engine
HomeCubaBiden lo hizo y Trump lo deshizo

Biden lo hizo y Trump lo deshizo

LA HABANA, Cuba. – Biden lo hizo y Trump lo deshizo. Lo que a aquel le llevó cuatro años para pensarlo, al nuevo inquilino de la Casa Blanca apenas le tomó unos segundos, a pesar de que muchos al interior del régimen llegaron a pensar que no le sería tan fácil, y que les bastaría con unos pocos meses para oxigenarse. 

Lo decían tan confiados que era difícil no creerles. Pues el entusiasmo y el triunfalismo no duró ni una semana, y esa rapidez con que fue destruido el hechizo a unos los decepciona pero a otros los llena de esperanza, más cuando con la acción ha dejado claro que ni siquiera en ese primer día de mandato, en que otros se irían de celebración o a atender asuntos quizás más urgentes, ha tenido en cuenta el tema Cuba.

Un asunto que para nada es menor frente a los que ya señaló Donald Trump en su discurso de investidura, sobre todo si se tiene cuenta no solo los vínculos históricos de los comunistas cubanos con el terrorismo mundial y el papel desestabilizador que juega en la política de la región sino, además, el modo en que ha incentivado la actual oleada   migratoria —en coordinación con Nicaragua y México— y la ha manipulado como factor de tensión en la frontera sur de Estados Unidos y posiblemente como oportunidad de una introducción masiva de agentes para la creación de grupos de influencia y operaciones de inteligencia allí donde ya era necesario reemplazar los que iban quedando. 

Es evidente, teniendo en cuenta los papeles que han jugado Nicaragua y México en la ruta trazada desde La Habana, que no se trata de una situación azarosa, o exclusivamente producto de una crisis económica agravada, sino de una verdadera operación coordinada entre aliados con que se intenta sacar provecho de un fenómeno que pudieron haber controlado pero que dejaron crecer hasta alcanzar ese caos migratorio que les permitió camuflar lechugas entre col y col, de ahí que algunos señalen con total razón que Miami se ha llenado de comunistas, y eso no es obra de la casualidad.

Se trata de una invasión silenciosa pensada por los mismos que han diseñado la “economía de guerra” sobre la base de remesas, que son también los que dieron luz verde a la creación de mipymes descontroladamente, como en un frenesí, para que no detectáramos entre tantos miles de “emprendedores” a aquellos otros “aventureros” y prestanombres cuyo entusiasmo les llegaba como una orden más de sus jefes de GAESA, de Villa Marista, o como una tarea del Partido, en tanto el Gobierno de Estados Unidos, con su interés en un “sector privado” que parecía de oro pero apenas era de fantasía mala, les dejaba una brecha por la cual colarse y esquivar sanciones.

Una brecha que pudiera cerrarse por completo si alguien dedicara algo de tiempo a revisar, con base en los registros de empresas pero además en lo investigado por la prensa independiente, quiénes son en realidad esos empresarios que, desde Estados Unidos, más negocios tienen en Cuba, cuáles son los que más cargas acarrean hacia la Isla y quiénes de ellos son los que más vemos repetirse como invitados en ferias, exposiciones y eventos del régimen castrista, como muestra de que poco les importa hacer negocios con una dictadura.

El castrismo está temblando y no de frío, sino de miedo porque el 20 de enero le ha llegado como la peor pesadilla, con más fuego y sangre de lo que esperaba, y a pesar de ese “gesto” que pretendían ser las excarcelaciones pero que de nada le ha valido frente a un Donald Trump que, como buen negociador, ni ha creído en la “buena voluntad” de su vecino ni se ha conformado con lo que fue suficiente para Biden. 

Trump quiere más, pero el régimen cubano se rehúsa a ir más allá de las excarcelaciones porque sabe que cuando habla de “resistencia” y “penurias” no son ellos los que las sufrirán, no mientras les funcionen esas brechas en el muro que aún les permiten respirar el aire fresco que les llega desde Miami, desde Europa, pero también desde ese Panamá donde los militares tienen registradas centenares de empresas y por donde pasa buena parte de lo que compran y de lo que venden, incluida esa carga de material de guerra que en julio de 2013 viajaba rumbo a Corea del Norte en el Chong Chon Gang. 

Ahora, sumada a la noticia del regreso a la lista de patrocinadores del terrorismo de la que fueron sacados apenas una semana atrás, llega la del cierre de la frontera, también la otra más terrible de las deportaciones masivas que quizás dé al traste con la invasión silenciosa y, para rematar, la posibilidad de que el control del canal de Panamá retorne a Estados Unidos, con lo que el juego se tornaría en extremo complicado, más cuando el potencial negociador no parece conformarse con excarcelaciones y pretende ir a por todo. Un negociador que en sus primeros minutos de gobierno ha demostrado cumplir con lo que prometió y cumplirlo con rapidez pasmosa, algo que jamás se le ha dado bien al castrismo.

RELATED ARTICLES
- Advertisment -
Google search engine

Most Popular

Recent Comments