MIAMI, Estados Unidos. — Aunque es conocido el mal estado de calles y avenidas en Cuba, en algunos territorios del país la situación al respecto puede calificarse de insólita.
En el municipio de Artemisa, ubicado en la provincia del mismo nombre, existe registro de un bache con casi treinta años. El mismo se encuentra frente a la Escuela Secundaria Básica Manuel Valdez, en la calle 56.
El hecho fue reportado en redes sociales por el Instituto Cubano de Libertad de Expresión y Prensa (ICLEP).
“El hueco rebosante de agua pestilente que se encuentra frente a la escuela Manuel Valdez en la calle 56, está a punto de arribar a su 30 aniversario de existencia, resultado del abandono de las empresas del régimen a cargo de conservar el estado de las vías de la ciudad”, señaló la organización en su cuenta de Facebook.
Adaptados desde hace décadas a los baches y a las constantes roturas en las carreteras, los cubanos tienen claro que se trata de un tema sin solución.
En agosto pasado, CubaNet entrevistó a pobladores de varias provincias cubanas, quienes coincidieron en que el mal estado de las calles no interesa a las autoridades.
“Es una justificación constante. Entonces, no tienes a quien dirigirte, a quien reclamarle”, dijo a este diario un residente en La Habana.
Una de las razones recurrentes para justificar el mal estado de las calles son las constantes reparaciones de instalaciones hidráulicas y eléctricas. Sin embargo, no pocos opinaron que en ocasiones nadie se dedica ni siquiera a reparar los huecos que se realizan durante los mantenimientos.
“Hay una combinación de desidia y desinterés en el tema. Esta combinación no solo explica el deterioro de las calles de la Isla, sino también del resto de la infraestructura de nuestra sociedad”, declaró el comunicador José Alberto Álvarez Bravo.
