CIUDAD DE MÉXICO, México.- La actriz cubana Ana de Armas ha regresado a Cuba y se ha dejado ver junto a su amiga Claudia Alvariño en la Escuela Nacional de Arte (ENA).
Como ya es habitual, la actriz, protagonista de Blonde, compartió con su amiga íntima en la escuela donde ambas se formaron. En instantáneas publicadas por Claudia Alvariño (Muma) en las redes se puede ver a la artista posando en los pasillos y el techo de la ENA.
“Han pasado 22 años… nuestra escuela”, escribió en Instagram Muma, codirectora de la compañía infantil La Colmenita, afiliada al régimen.
También en las historias de esa red social Alvariño dejó constancia de su paso por la ENA junto con Ana y de la sorpresa de jóvenes artistas que no dudaron en retratarse con Ana de Armas.
Aunque ha trascendido la visita a través de las redes de Muma, en las de Ana de Armas no figura foto alguna de su estancia en La Habana.
Este año De Armas se ha dejado ver en Cuba en otras de sus asiduas “escapadas” en las que disfruta del privilegio de tener fiestas exclusivas y entrar al país sin ser cuestionada, como tantos artistas que ni siquiera tienen permitido viajar a la Isla por su postura crítica con el sistema.
En febrero, fue vista la madrugada en el exclusivo bar Johnny Club, durante un concierto de Alain Pérez y su Orquesta.
La nominada al Oscar estuvo acompañada de algunos de sus amigos habituales como Claudia Alvariño, el dramaturgo Jazz Vilá y el actor Denis Ramos.
Al parecer, la actriz de 35 años viajó en esa ocasión de incógnito, pues en las redes, a diferencia de en otras ocasiones, no han trascendido publicaciones sobre su visita.
En abril de 2023, la actriz festejó en La Habana su cumpleaños, donde viajó acompañada de su novio el empresario Paul Boukadakis, en una visita que estuvo envuelta en polémica, y causó tanto el rechazo como la defensa de los cubanos.
Su visita y la agenda que siguió dividieron a la audiencia cubana en dos grandes grupos. De un lado muchos la acusaron de estar lavando el rostro de la dictadura, que usa su imagen para mostrar una Cuba ficticia. Del otro, hay quienes defendieron su derecho de visitar su país de origen y elegir a su antojo qué hacer o no.
Otra de las críticas que ha recibido Ana está relacionada con que se ha mantenido al margen de las violaciones de derechos humanos en Cuba y que ni siquiera denunció cuando hostigaron a su hermano, el fotógrafo Javier Caso. Tampoco se pronunció tras el 11 de julio.
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