Yaquelín García Jaén fue acusada inicialmente por “actividad económica ilícita”, pero el cargo fue cambiado a “instigación a delinquir”. Su esposo asegura que ella no participó en las manifestaciones del 6 de noviembre.
La activista Yaquelín García Jaén fue detenida el 8 de noviembre, dos días después que estallara una protesta popular en Bayamo, capital de la provincia Granma, y acusada de un delito de instigación a delinquir
Antes, los instructores policiales la instruyeron de un cargo de “actividad económica ilícita” que fue cambiado posteriormente.
“Fue detenida dos días después de las protestas de aquí, pero ella no participó en nada de eso. A las 8 de la mañana [del 8 de noviembre] se efectuó un registro en la casa de la madre de Yaquelín García Jaén, la señora Emma Luisa Jaén, vecina del Reparto Rosa la Bayamesa, por un supuesto delito económico de venta de productos ilícitos, ocupándose el carné de identidad de Yaquelín, su pasaporte y dos tarjetas de banco, una en CUP y otra en MLC, una cafetera, un fogón de inducción y una cantidad que no llegaba a 9,000 pesos”, explicó a Martí Noticias el exprisionero político Ariel Arzuaga, esposo de García Jaén y padre de su hija.
“Me personé en la Unidad Provincial de Investigaciones Criminales y me atendió el mayor Daniel Matamoros, instructor del caso, el cual me dijo que a Yaquelín se le había cambiado el delito del que la están acusando. Es decir, del delito económico de venta de productos de procedencia ilegal por el delito de instigación a delinquir, porque dice que ellos tienen un audio que muestra que Yaquelín es la coordinadora del movimiento Cuba Primero en Bayamo, y que el expediente se pasaría a la Fiscalía para que tomaran medidas cautelares”.
El Código Penal cubano, por el delito de “instigación a delinquir”, establece sanciones de seis meses a un año de privación de libertad, o “multas de cien a trescientas cuotas o ambas”. En el caso de que el delito de instigación se cometa a través de las redes sociales o algún otro medio de comunicación social, las sanciones previstas en cada caso “son aumentadas en la mitad en sus límites mínimos y máximos”.
En una llamada telefónica de nuestra redacción, la hija de Yaquelín, Ester Arzuaga Jaén, confirmó que a su madre le impusieron medida de prisión provisional, aunque todavía no la han llevado para el establecimiento penitenciario.
Juristas independientes cubanos han criticado el uso indiscriminado de la prisión provisional contra los acusados, especialmente los envueltos en causas políticas, aun después de aprobada la Ley de Ejecución Penal de 2022 que, supuestamente, fortalece la presunción de inocencia.
García Jaén, quien perteneció al movimiento Damas de Blanco, fue enjuiciada y convicta, en el año 2018, por presunto “robo con fuerza”, un delito que Arzuaga califica de fabricado por la policía política.
“Fue condenada a cinco años, sanción que extinguió en el mes de agosto del 2024 y ahora le están fabricando otro”, lamentó.
Arzuaga también acudió a la Fiscalía Municipal a interesarse por el caso de la madre de su hija: “Me dijeron que la Fiscalía tiene 60 días hábiles para dar respuesta mientras sigue presa injustamente”.
Al menos tres activistas están en prisión preventiva y otros cuatro han sido interrogados, por sus supuestos vínculos con el movimiento opositor, radicado en Miami, Cuba Primero.