Nahara Candelaria Milán fue detenida en Texas cuando trasladaba a siete indocumentados en su vehículo
14ymedio, La Habana |
La cubana Nahara Candelaria Milán, de 26 años, enfrenta un juicio en EE UU por el delito de tráfico de personas y, de resultar culpable, deberá pagar 10.000 dólares y cumplir 10 años de prisión. La joven fue detenida este lunes por una infracción de tránsito mientras se dirigía a Eagle Pass (Texas) y, durante el registro de su automóvil, la Policía descubrió que transportaba a siete migrantes ilegales recogidos en las inmediaciones del Río Bravo.
Según el teniente Efrain Valdez, del cuerpo de detectives del condado estadounidense de Maverick, Milán admitió ser cubana mientras examinaban el vehículo, un Honda del año 2019, añadió. De momento, las autoridades no han revelado la nacionalidad de las personas que transportaba.
Los agentes de la Patrulla Fronteriza de EE UU se hicieron cargo de los siete migrantes irregulares y,luego de tomarles sus datos, fueron llevados a un centro de detención en Eagle Pass, desde donde fueron retornados a México.
Eagle Pass es una de las zonas predilectas de los coyotes para transportar migrantes a bordo de vehículos ligeros y a menudo precarios, como camionetas. Este miércoles, uno de estos transportes se volcó durante intentando huir de la Policía. El traficante, del que no se reveló su identidad, se encuentra gravemente herido en un hospital de San Antonio (Texas) y los nueve indocumentados que transportaba fueron entregados a la Patrulla Fronteriza.
En junio pasado el alguacil Brad Coe advirtió de la participación de cubanos en redes de tráfico de migrantes. De acuerdo con el oficial del condado de Kinney, cerca de Brackettville (Texas), las organizaciones de narcotráfico presionan a algunas personas a las que han facilitado su entrada a EE UU para convertirlas, a su vez, en coyotes a su servicio.
Coe subrayó que los cubanos participan como parte de “algún pago que tienen pendiente o por extorsiones”. Las autoridades estadounidenses abrieron una carpeta de investigación desde el pasado abril, cuando en Kinney se detuvo a Rainel Lázaro Silies y a Lima Gálvez González. Esta pareja fue procesada por transportar a cinco indocumentados en su camioneta.
Dos meses después, en la misma región, se detuvo al cubano Julio César Aspiazu Gómez, que fue procesado por llevar a cinco migrantes en su automóvil. Este cubanoamericano obtuvo la libertad tras pagar una multa de 5.000 dólares.
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